¿Cómo y por qué nació esta aventura humana y literaria?
Me resulta difícil tratar de categorizar y definir este libro y prefiero aclarar que no es un estudio sociológico sobre los inmigrantes, ni un estudio sobre el sistema educativo actual ni una investigación periodística.
Este libro nació por varios motivos pero el primero de todos, y siendo un elemento muy personal, fue una forma de recobrar el sentido (de la vida). Al principio de 2015, lo ocurrido en Charlie Hebdo me hizo tomar conciencia del poder del oscurantismo religioso y del dogmatismo llevados a grados extremos. Provocó en mí una sensación aplastante de impotencia y la convicción de que no era posible cambiar el mundo. Pero mi perspectiva era errónea: contemplaba solo el hecho de hacer grandes cambios y me desconecté de los pequeños gestos cotidianos que surten efecto. Cuando conocí a Judith, la ilustradora, sentí mucha admiración por su trabajo y me nació la idea de realizar un trabajo con ella. Escogí la temática muy rápidamente: ¡iba a ser la educación! Al trabajar con jóvenes desde la Fundación donde estaba, quería hacer algo con una finalidad social para jóvenes de barrios difíciles y así empezó esta aventura… Y de forma paulatina, volvió el sentido y mucho más… experimenté una experiencia transformadora basada en las emociones que me conectó todavía más con los demás y que me permitió aceptar más fácilmente la dualidad humana.
Buscando las estrellas es el fruto de encuentros humanos mágicos, de un gran anhelo de compartir y de dar la palabra a jóvenes provenientes de la inmigración que, sin ser adultos todavía, tienen opiniones y sueños impregnados de sabiduría, de claridad y de esperanza. Basado en entrevistas a alumnas y alumnos del Institut Rambla Prim de Barcelona, explica la vida de jóvenes que han experimentado una dolorosa situación de desarraigo y que procuran cada día encontrar la mejor forma para fusionar sus dos culturas, ahondando en su proceso de integración y su inmersión en el sistema educativo catalán.
La composición multicultural de nuestras sociedades es una realidad cada vez más acentuada debido a la globalización. Esta dualidad representa o una gran riqueza a la hora de construir algo juntos o una amenaza para la cohesión social. Es innegable que esta heterogeneidad favorece intercambios, descubrimientos y mucha riqueza. Pero los retos a los que se tienen que enfrentar los profesores son numerosos: ¿cómo comunicarse con estos alumnos y su familia cuando la cultura y los valores discrepan tanto? ¿Cómo se puede acompañarles y facilitarles todas las herramientas necesarias para integrarles cuando apenas dominan el idioma del país de acogida? ¿Cómo hacerles llegar a una comprensión mutua, respetando la cultura del otro sin aniquilar la suya?
Este libro consta de una entrevista a la profesora del instituto así como de siete historias: descubriréis a la profesora Azul, una persona dedicada a su profesión y que se entrega totalmente a la construcción de una sociedad multicultural, donde cada uno pueda encontrar su lugar; luego conoceréis a Suhaila, una adolescente que nos hace entrar en su universo lleno de musicalidad y de tradiciones gitanas; a Sarayama, de origen gitano que es un ejemplo de resiliencia y de superación personal; a Zaïsha, una joven pakistaní feminista defensora de la libertad y de la igualdad; a Dua, una alumna pakistaní tradicional que, a pesar de experimentar cierta libertad, sigue fiel a los principios religiosos que rigen su vida; a William, un chico de República Dominicana que también ha encontrado el sentido de la vida en la religión; a Fátima, una alumna marroquí con un potencial artístico increíble, pero que lucha continuamente contra su falta de autoestima, y a Granpetit, un adolescente de Ecuador que ha sufrido la experiencia mortífera de estar en una banda.
Cada uno de estos alumnos me aportó algo distinto: Suhaila me contagió su alegría de vivir; Sarayama me hizo reflexionar sobre nuestra capacidad de superación y sobre cómo conectar con nuestra fuerza interior; Zaïsha despertó más veleidades feministas en mí y mucha admiración; la capacidad de aceptación de Dua y William me conmovió mucho; la actitud sabia y humilde de Fátima fue una gran enseñanza, y las vivencias de Granpetit me hicieron tomar conciencia del microcosmos en el que nos encerramos sin prestar atención a las otras realidades que nos rodean.
Las temáticas abordadas en el libro son numerosas (composición multicultural de nuestra sociedad, retos a los que se enfrenta el ámbito educativo, papel de la religión, importancia de la figura materna, sabiduría de la juventud, resiliencia y autosuperación, etc…).
La educación se sitúa aquí ante un reto mayor: debe hacer convivir estas diversidades e incorporar el diálogo intercultural de manera que los jóvenes puedan integrarse sin olvidar sus raíces. La escuela puede ser un lugar privilegiado para crear conjuntamente y construir una convivencia armoniosa, al permitir un descubrimiento de la cultura de cada uno y de la cultura del otro. Buscando las estrellas es un libro que pretende ayudar a mirar la diferencia con ojos de igualdad.
Cada uno de vosotros podrá tener una lectura muy subjetiva y personal. Hay muchas otras temáticas importantes en este libro de las que podría hablar. Pero me gusta la idea de que cada uno pueda llevarse algo muy personal y, sobre todo, de que pueda conectarse con sus propias emociones. ¡Espero que estas historias singulares os lleguen al alma y despierten puntos de partida de reflexiones o de diálogos internos!